[Artículo actualizado el 19/09/2023]
El organismo necesita nutrientes como minerales y vitaminas para funcionar correctamente. Cada nutriente desempeña una función específica en el organismo y también hay una determinada cantidad necesaria. Una carencia se produce cuando esta cantidad es insuficiente. Si no se trata a tiempo, puede provocar enfermedades graves. En este artículo voy a hablar de la carencia de calcio, sus causas, síntomas y prevención.
¿Qué es la carencia de calcio?
El calcio es una sal mineral presente tanto en la sangre como en los huesos. Existen 2 tipos: el calcio unido a proteínas, en particular a la albúmina, y el calcio que no está unido a proteínas, conocido como calcio ionizado. Este último es el que contribuye al buen funcionamiento del organismo, como la coagulación y la mineralización ósea. Esta deficiencia, conocida como hipocalcemia, se produce cuando el nivel de calcio ionizado en la sangre es extremadamente bajo.
¿Cuáles son las posibles causas?
Las causas de la hipocalcemia son muy variadas. En la mayoría de los casos, se debe a una enfermedad, pero el estilo de vida también puede ser el motivo. La carencia también puede producirse durante un periodo concreto de la vida.
- Edad: cuanto mayor es una persona, mayor es el riesgo de padecer una carencia de calcio;
- Consumo insuficiente de este nutriente durante un largo periodo, especialmente durante la infancia;
- Transfusiones masivas de sangre;
- Intolerancia a los alimentos ricos en calcio;
- La dieta vegana: los alimentos ingeridos no aportan suficiente calcio;
- La menopausia;
- Trastornos endocrinos como el hipoparatiroidismo, que provoca un descenso en la producción de la hormona paratiroidea o PTH, que controla la cantidad de calcio en la sangre;
- Falta de vitamina D, que complica la absorción del calcio por el organismo;
- Pancreatitis;
- Falta o exceso de magnesio;
- Exceso de fosfato en la sangre;
- Insuficiencia renal;
- Ciertos medicamentos reducen la absorción del calcio, como la fenitoína, el fenobarbital, la rifampicina y los corticosteroides.
¿Cuáles son los síntomas de una carencia de calcio?
Es muy posible que el organismo no muestre ningún signo de deficiencia de calcio, especialmente en las primeras fases. Los síntomas sólo se manifiestan cuando la persona padece hipocalcemia durante mucho tiempo.
El calcio es un elemento esencial del organismo. Garantiza el buen funcionamiento de muchas partes del cuerpo. Los síntomas pueden manifestarse en casi todas partes:
- Pérdida de memoria, alucinaciones, convulsiones ;
- Hormigueo y entumecimiento en la cara y las extremidades;
- Calambres musculares repetitivos;
- Los huesos se rompen con facilidad;
- Las uñas se vuelven quebradizas y se rompen con facilidad;
- El crecimiento del cabello se detiene o se ralentiza.
¿Qué hacer en caso de carencia?
Si tiene síntomas de carencia de calcio, lo primero que debe hacer es concertar una cita con un médico lo antes posible y seguir sus instrucciones. Sobre todo, evite tomar suplementos sin consultar a un profesional de la salud. Una sobredosis puede provocar otras enfermedades, como cálculos renales.
Diagnóstico
El médico empezará por comprobar sus antecedentes familiares de hipocalcemia y osteoporosis. A continuación, le pedirá que se haga un análisis de sangre, si existe alguna sospecha. La prueba consiste en medir la cantidad total de este nutriente en el organismo, la cantidad de albúmina y la cantidad de calcio ionizado.
Para un adulto, el nivel normal se sitúa entre 8,8 y 10,4 mg/dL. Un nivel por debajo de este rango ya puede confirmar que padece una carencia de calcio. Sin embargo, el nivel normal es ligeramente superior en niños y adolescentes.
Tratamiento
En general, la hipocalcemia es fácil de tratar. Simplemente consiste en añadir más calcio a su dieta. Los suplementos de calcio más recomendados son :
- Carbonato cálcico: el más barato del mercado y el de mayor contenido en calcio;
- Citrato de calcio: el más fácil de absorber por el organismo;
- Fosfato cálcico: también es fácil de absorber y no provoca estreñimiento.
Los suplementos de calcio están disponibles en varios formatos: líquido, comprimidos, pastillas.
El tratamiento puede durar desde unos días hasta tres meses, dependiendo de la gravedad de la carencia. En algunos casos en los que los suplementos y las dietas adoptadas no sean suficientes, se administrarán inyecciones periódicas.
También debe tener en cuenta que el calcio puede interferir negativamente con ciertos medicamentos:
- Atenolol: puede reducir la absorción de calcio si no se toma 2 horas antes ;
- Colestipol: puede reducir la absorción de calcio y aumentar la pérdida de calcio en la orina;
- Estrógenos en forma de medicamentos: aumentan los niveles de calcio en la sangre y, por lo tanto, pueden provocar hipercalcemia si se toman suplementos de calcio al mismo tiempo;
- Medicamentos diuréticos: aumentan los niveles de calcio, como en el caso de la hidroclorotiazida, o los reducen si se utiliza furosemida;
- Antibióticos como las fluoroquinolonas y las tetraciclinas, que pueden reducir la absorción del calcio.
Alimentos a elegir para limitar el riesgo de carencia de calcio
El calcio desempeña un papel importante en la salud del corazón, la función muscular, el fortalecimiento de los huesos, etc. La mejor forma de prevenir la hipocalcemia y mantener un nivel estable de este nutriente en la sangre es reponerlo a través de la dieta.
Sin embargo, muchos alimentos ricos en calcio también son ricos en ácidos grasos saturados, que pueden provocar otras enfermedades como las cardiovasculares y la hipercolesterolemia. Para evitarlo, lo mejor es consumir los alimentos que se indican a continuación, que no contienen lactosa pero son ricos en calcio.
- Semillas de sésamo, amapola, apio y chía;
- Quesos sin lactosa, como el parmesano, el comté y el gruyère;
- Yogur desnatado;
- Conservas de sardinas y salmón;
- Alubias y lentejas;
- Almendras ;
- Proteína de suero ;
- Algunas verduras de hoja verde como las espinacas y la col rizada;
- Ruibarbo;
- Alimentos fortificantes como las barritas de cereales y el pan de maíz;
- Amaranto ;
- Edamame ;
- Tofu ;
- Zumos fortificantes como el zumo de naranja
- Higos secos;
- Leche de cabra.
Para los niños y adolescentes, la dosis diaria recomendada de calcio es de 1300 mg; 1000 mg para las personas de entre 19 y 50 años y 1200 mg para los mayores de 50 años.